Canción que nos habla de solidaridad, de paz y esperanza

domingo, 29 de noviembre de 2009

1º Domingo de Adviento. Ciclo C


Basado en los textos de Lc 21, 25-28.34-36 y Jer 33, 14-16.











El profeta Jeremías predicando

Teo: ¡Hola chicos!

Dora: Hola amigos, ¿sabéis que celebramos hoy?

Teo: Claro, es el inicio del Adviento, comenzamos un tiempo nuevo.

Dora: Y empezamos a prepararnos, porque dentro de unas semanas llega la Navidad.

Teo: Hoy os presentamos un personaje importante del Adviento, el profeta Jeremías.

Dora: Hola, profeta Jeremías, ¿nos quieres contar algo sobre el Adviento? ¡Habla, que te escuchamos!

Jeremías: Hola a todos. Yo soy un enviado de Dios para deciros que el Señor está cerca y que
                 tenemos que prepararnos para recibirle.

Teo: Profeta Jeremías, ¿cuál es la misión de un profeta? ¿que te ha encargado el Padre Dios que hagas?.

Dora: Si, ¿y qué es una profecía?

Jeremías: Una profecía es un mensaje que Dios quiere que todos lo conozcan, y para eso elige a
                 un  mensajero, que tiene que comunicarlo a la gente.

Teo: ¿Y cuál es la profecía que tú nos anuncias de parte de Dios?

Jeremías: Dios dice: "Mirad que llegan días en que cumpliré la promesa que le hice a la gente de Israel
                 y a la gente de Judá".

Dora: Profeta Jeremías, ¿y cuál fué la promesa que hizo el Padre Dios?, por favor, repítela que no nos
           acordamos.

Teo: Si, eso, ¡repítela, por favor!.

Jeremías: (Despliega un pergamino y dice con voz potente y grave, y tono pausado:)

                "En aquellos días y en aquella hora, haré que de la familia del rey David
                  nazca un descendiente legítimo, que hará justicia y derecho en la tierra.
                 En esos días se salvará Judá y en Jerusalén vivirán tranquilos
                 y dirán: 'el Señor es nuestra  justicia' "

Dora: La profecía habla de Jesús, ¿verdad, profeta Jeremías?

Jeremías: Claro, Jesús es el descendiente legítimo del rey David.  José, el padre de Jesús y  esposo de la
                 Virgen María era de la familia de David.

Teo: Entonces Jesús es nuestra justicia, él es el Señor.

Jeremías: Escuchad ahora lo que dice Jesús:

(Entra Jesús acompañado por dos de sus discípulos, los apóstoles Pedro y Juan, que hablan con él)-

Jesús: Llegará un día en que este mundo se acabará.

Pedro: Maestro, tenemos miedo de ese día.

Juan: Maestro, ¿cómo será el fin del mundo? ¿que cosas sucederán?

Jesús: Ya sabeis lo que dicen los antigüos: se producirán signos en el sol, la luna y las estrellas.

Pedro: ¿Y que pasará en la tierra?

Jesús: La gente estará angustiada y temerosa ante lo que se le viene encima al mundo.

Juan: ¿Será verdaderamente todo tan desastroso, Señor?

Jesús: Vosotros no esteis tan preocupados por eso; cuando llegue el gran día, todos verán al Hijo de Dios
            venir en una nube, con gran poder y gloria.

Pedro: Maestro, ¿y que tenemos que hacer nosotros? ¿nos tenemos que alegrar o entristecer?

Jesús: Vosotros levantaos, alzad la cabeza y vivid sin miedo, ¡se acerca vuestra liberacion!.

Juan: Entonces... ¡parecerá una fiesta! ¡y además tú estarás con nosotros!

Jesus: Haced lo que siempre os digo: ¡practicad el bien, no viváis enganchados en malas acciones y vicios,
           no dejéis que el dinero, los placeres de este mundo, la mala vida y los pecados os tengan
           esclavizados!

Teo: Jesús siempre nos da buenos consejos.

Dora: Sus palabras son siempre una buena noticia para nosotros.

Teo: Al principio del Adviento nos dice que estemos atentos y que le pidamos fuerzas a Dios para
        apartarnos del mal.

Dora: Y así responderemos al mensaje del profeta Jeremías de hacer la voluntad de Dios y de mantenernos
          unidos al Señor.